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Gobernador de Neuquén ofrece gas argentino a Brasil, pasando por ductos bolivianos

Argentina ofreció suministrarle gas natural procedente de Vaca Muerta, la segunda reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo de este tipo.

El gobernador de la provincia argentina de Neuquén, Omar Gutiérrez, se mostró dispuesto a negociar con Brasil el suministro de gas de Vaca Muerta durante su intervención en la conferencia Rio Oil & Gas, la mayor feria del sector hidrocarburos de América Latina que se celebra esta semana en Río de Janeiro.

«Hay por lo menos cinco posibles proyectos de integración que exigen la construcción de gasoductos y que cuentan con diferentes fuentes de financiación e inversores, incluyendo públicos y privados», indicó Gutiérrez.

El gobernador afirmó que Vaca Muerta, una gigantesca formación de hidrocarburos no convencionales en la provincia de Neuquén, en la Patagonia argentina, tiene gas suficiente para garantizar la autosuficiencia de Argentina y para abastecer parte de las necesidades de países como Chile y Brasil.

Gutiérrez recordó que Argentina ya exporta gas de Vaca Muerta a Chile y que gracias a la construcción del gasoducto Néstor Kirchner, cuyas obras están en proceso, se podrá llevar el gas hasta Brasil y Bolivia.

El gobernador aseguró que desde la ciudad de Santa Fe es posible poder llevar el gas a San Pablo, mayor ciudad de Sudamérica y principal centro industrial del continente, a través de un caño que pase por Bolivia y aproveche el ya existente gasoducto Bolivia-Brasil.

También es posible llevar el gas de Vaca Muerta a Porto Alegre, en el sur de Brasil, mediante una conexión al gasoducto que pasa por Uruguayana, en la frontera entre los dos países, o construir un ducto directamente entre Santa Fe y San Pablo.

«Hay que dejar de usar la conjunción ‘o’ y reemplazarla por la ‘y’. Todos los frentes son posibles, hay inversores buscando las diferentes posibilidades de conexión», dijo.

Gutiérrez se mostró convencido de que el gas de Vaca Muerta puede atender el mercado que deje de ser abastecido por Bolivia, cuyas exportaciones a Brasil se han reducido.

Esta posibilidad ya fue acordada en la reunión bilateral entre autoridades de Argentina y Bolivia la semana pasada en la que se establece que la empresa argentina YPF “analizará la alternativa de aprovechar la estructura de Bolivia para transportar gas hacia Brasil desde una producción de Vaca Muerta”.

Actualmente, la producción en Vaca Muerta es de 280.000 barriles de petróleo diarios y 92 millones de metros cúbicos de gas diarios (más del doble que Bolivia), aunque por las inversiones previstas en los próximos años, ambas cifras deben aumentar considerablemente.

La Argentina está a las puertas de convertirse en un exportador neto de energía, y el petróleo y el gas no convencionales son los más inmediatos recursos a los que podrá apelar para cambiar su matriz económica, no solo por volúmenes sino por el desarrollo ya alcanzado por la industria en Vaca Muerta.

Según diversos análisis, para ello requerirá inversiones de entre $us 7.000 y $us 10.000 millones al año para sostener e incrementar las áreas de producción.

Es posible que el gas argentino en los próximos años esté entrando al mismo mercado del cual Bolivia está saliendo por haber descuidado la inversión y la exploración masiva de nuevas áreas en los últimos 15 años.

Con información de TNS Latam – Periódico de la Energía